lunes, 31 de marzo de 2008

La Música en Nuestras Vidas...

“La música es para el alma lo que la gimnasia para el cuerpo”… afirmaba
Platón.

Lo que el famoso filósofo griego desconocía es que una melodía
puede ser también terapéutica para nuestro organismo. Así lo revelaban
recientemente una serie de estudios realizados en el Hospital Westminster
de Londres, donde un equipo médico ha llegado a la conclusión de que los
pacientes que asisten a conciertos de música en directo necesitan menos
fármacos y se recuperan con mayor rapidez que el resto de los enfermos.
Además, los investigadores han medido los efectos fisiológicos de la
música y han observado que reduce la presión sanguínea, el ritmo cardíaco
y el nivel de las hormonas relacionadas con el estrés.

Por si esto fuera poco, escuchar música puede reducir el dolor crónico hasta
un 21 por ciento y la depresión hasta un 25 por ciento, según una
investigación publicada en 2006 en la revista Journal of Advanced Nursing.

Además, de acuerdo con otro estudio llevado a cabo conjuntamente por la
Universidad estadounidense Case Western Reserve y el Hospital General
Buddhist Tzu-Chi de Taiwán, escuchar música suave 45 minutos antes de
irse a dormir es un buen antídoto contra el insomnio, mejora la calidad del
sueño y lo prolonga, especialmente en personas mayores. Y si se trata de
estimular el cerebro, las últimas investigaciones indican que cantar mejora
la codificación de información y activa las redes neuronales, potenciando la
memoria.

Vivimos rodeados de sonidos que a veces nos gustan y en otras ocasiones nos molestan.
En momentos determinados necesitamos que haya silencio: cuando estamos enfermos, concentrados en alguna actividad, o también cuando queremos disfrutar de un acontecimiento musical.
Algunas veces escuchamos música voluntariamente, pero en muchas ocasiones nos acompaña sin apenas darnos cuenta.

La música forma una parte esencial de nuestras vidas. Nos acompaña en momentos importantes, afecta a nuestro estado de ánimo y representa un signo de identidad, especialmente para los más jóvenes

Vivir sin música seria casi imposible. Aún antes de nacer ya contamos con una experiencia musical.

La música cumple diversas funciones, nos ayuda a soñar, nos hace compañía, alivia nuestras preocupaciones, nos alegra el espíritu, nos permite sentirnos parte de un grupo social más amplio, nos libera.


Es curioso como en la vida hay momentos que explicas o recuerdas con una canción o una cierta melodía. Es algo así como decir que existen las canciones de mi vida, que suena a programa casposo de TV en sábado por la noche, pero que en realidad es simplemente la afirmación de que la música nos acompaña en muchos momentos de nuestra existencia, tanto buenos como malos.

Esta es una canción que me dedicó alguien hace un tiempo, no sé... por que la recordé hoy, pero gracias a ella surgió este post.